A finales de abril, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) aprobó la vacuna contra el dengue del laboratorio japonés Takeda, conocida como Qdenga.
Esta inmunización que se administra en 2 dosis que deben aplicarse separadas, por un intervalo de 3 meses. El inoculante protege contra los 4 serotipos y pueden recibirla -con prescripción médica- todas aquellas personas a partir de los 4 años, y hasta cualquier edad, que hayan tenido (o no) la infección.
En diálogo con Radio Mitre Santa Fe, Daniela Hozbor, científica argentina y experta en vacunas, sostuvo que "es un desarrollo que es querido, pero no es la solución del problema. Es una herramienta más por lo que se recibe como una buena noticia. El esquema será de dos dosis con una separación de tres meses entre la primera y segunda dosis. Tiene resultados de seguridad y de prevención".
"Es una vacuna que se puede sumar a las otras estrategias que se tienen que seguir aplicando porque es un virus que circula", agregó.
Hozbor precisó que lo que hace la vacuna "es que la enfermedad no se desarrolle a un estado complicado". En ese sentido afirmó que "se puede aplicar en población a personas que no tuvieron la infección como a los que si la tuvieron".